Cegajina y el poder de la democracia
Extremadura (España) cuenta con un fenómeno atmosférico que ha dejado una huella indeleble en el carácter y la cultura de la zona a lo largo de los siglos: la niebla. Esta espesa cortina de misterio trasciende que su naturaleza meramente meteorológica es conocida «Cegajina». Es un legado vivo, un patrimonio inmaterial que se entrelaza con la identidad única de Extremadura, convirtiéndose en un elemento intrínseco de su cultura a lo largo de las generaciones.
Una composición musical guiada por las decisiones del público
Tomando nuestra identidad y legado como inspiración hace meses comencé a componer una obra musical para violoncello y piano. Pero esta pieza no es solo una composición típica; es una experiencia, un experimento cooperativo y un work in progress que evoluciona con cada presentación.
Cegajina es una composición musical guiada por las decisiones del público. A través de una acción musical cooperativa la pieza se forja poco a poco, a través de los sucesivos conciertos, y gracias a la participación activa del público. En cada actuación, la audiencia tiene la oportunidad de aportar ideas, sugerencias y emociones que se integran en la pieza, dando forma a su desarrollo y evolución. Cada interpretación se convierte, entonces, en una nueva versión de la obra, imprimiéndole un carácter único y vibrante.
Este video muestra la interpretación de la primera parte de la pieza en el Museo Vostell de Malpartida de Cáceres durante el Meet Up de Industrias Creativas y Culturales de Extremadura de Cultur Coop organizado por Wazo Coop:
Democracia en acción
El 10 de Noviembre de 2023 marcó un hito emocionante para Cegajina en el escenario del Music4Coop Fest, una iniciativa organizada por Wazo Coop que fusiona la música y la cooperación.
Antes de que diese comienzo el concierto en el que Carmen Agúndez Oso (violoncello), Eduardo Sánchez Calderón (piano) y Raquel Otero Vaughan (violín) interpretaron mis piezas de música social, se distribuyeron papeletas entre las personas presentes, desencadenando un proceso democrático que transformaría la dirección de la pieza.
La interpretación inicial presentó la primera parte de Cegajina, un work in progress de 2 minutos que sirvió como preámbulo para la verdadera participación del público.
Tras interpretar la primera parte la audiencia asumió el papel de decisiones cruciales para el futuro de la composición.
El público debía votar cómo debía continuar la pieza escogiendo entre dos opciones: 1) Misterioso y Adagio, donde la música asumiría un carácter evocador y misterioso con ritmos suaves y lentos, y la melodía sería melancólica y expresiva, como explorando un misterio entre la niebla, o 2) Energético y Allegro, una sección en la que la música sería enérgica y rápida, con ritmos dinámicos y vivaces, y la melodía reflejaría alegría y vitalidad, como si la niebla se disipara, revelando una escena rebosante de vida.
El público votó. El futuro de Cegajina estaba en las manos de las 70 personas que asistieron al concierto. Allí se encontraban personas de toda Europa como los 20 aspirantes a European Music Cooperators que vinieron a formarse con Wazo Coop, agentes clave del territorio con interés en la cooperación (instituciones públicas, cooperativas y entidades de la economía social, empresas…) y miembros de la comunidad local de Cáceres.
El recuento reveló que la mayoría de la audiencia prefería que la pieza continuase hacia una sección enérgica y allegro que desvelase a Extremadura tal y como es: llena de vida.
Este resultado, más que una elección musical, simbolizó el deseo colectivo de revelar la esencia misma de Extremadura. La preferencia por una tonalidad vibrante y llena de vitalidad reflejó la conexión entre la música y la representación de la región, despojándola de misterio para dar paso a una escena auténtica y bulliciosa. La elección democrática trascendió la esfera musical para convertirse en una declaración sobre la percepción colectiva de Extremadura como un lugar lleno de vida y energía.
El poder de la democracia
Creo profundamente en el poder transformador de la música por eso deseo democratizar el acto de componer. El proceso democrático en la creación de Cegajina va más allá de la música; es una representación simbólica del poder transformador de la cooperación y la elección colectiva.
El proceso democrático en Cegajina es fundamental ya que otorga a la audiencia un papel activo y decisivo en la creación musical. Esta interacción directa proporciona un sentido de pertenencia a quienes experimentan la pieza, creando una conexión única entre el público y la obra musical.
Esta acción musical cooperativa se convierte así en un homenaje a la riqueza cultural y la vitalidad de Extremadura, demostrando que la democracia puede ser la melodía que une a una comunidad y da vida a una composición única y vibrante.