Nuestro patrimonio, nuestra identidad
Mañana 12 de Diciembre La Ruralité volverá a sonar en Extremadura, en esta ocasión en la Facultad de Ciencias de la Documentación y la Comunicación de la Universidad de Extremadura, en Badajoz. Lo hará en el marco del Cultur Coop Fest y hace unos días os enviaba esta invitación donde tenéis todos los detalles:
Hace unas semanas también os escribía para invitaros a asistir al concierto de Música Social que organizamos en Almoharín (Cáceres) en el marco del proyecto Rural-ESS de Wazo Coop, co-financiado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Almoharín.
Bajo el título «Nuestro Patrimonio, Nuestra Identidad», este concierto rindió homenaje a las raíces culturales de Sierra de Montánchez y Tamuja y resaltó la riqueza de su legado.
Reconocer y realzar la importancia del patrimonio cultural y natural que caracteriza los territorios es esencial para preservar y transmitir la identidad de las comunidades rurales. Si centramos nuestros esfuerzos en fomentar una conexión profunda con las raíces, la historia y la identidad de Sierra de Montánchez y Tamuja, las generaciones presentes y futuras podrán entender y apreciar su herencia.
Durante el concierto pudimos disfrutar de una serie de piezas que reflejaron la esencia y diversidad cultural de la región, ermitiendo a la audiencia conectar con su identidad a través de mi música y la de Natalia Esquivel, Carmen Agúndez y Eduardo Sánchez, que estrenaron piezas inspiradoras.
Estrené mi nueva pieza “Casamientos de higo y nuez”, enfocada en el ODS 3 - Salud y bienestar, y que refleja la esencial del otoño en Extremadura. Casamientos, bodas, turrón de pobre… Mi nueva pieza explora la profunda conexión entre los sabores y la memoria que nos invita a conectar con nuestras raíces. Con texturas y sonoridades que sugieren la dulzura del higo y el toque terroso de la nuez, esta música se convierte en un homenaje sonoro a la tierra, las costumbres y la identidad cultural de Almoharín y Sierra de Montánchez y Tamuja.
Además gracias al Ayuntamiento de Almoharín pudimos degustar justo antes de escuchar mi pieza unos deliciosos casamientos de higo seco y nuez.
El público quedó maravillado con la calidad interpretativa de La Ruralité, cuya música evocó imágenes del rico patrimonio natural y cultural de la comarca, transmitiendo un mensaje de esperanza y responsabilidad hacia su conservación.
El éxito del concierto fue evidente en la participación activa del público y los elogios recibidos por la organización. Desde los primeros acordes hasta los aplausos finales, el evento fue una celebración del talento, la cultura y el compromiso social.
¡Hasta pronto!